
Mírame, mírame por un momento por favor. Mira cómo tengo las piernas, mira cómo tengo los brazos. Mira mi rostro…¡mira cómo lo tengo!
Si pudieras ver cómo tengo el corazón. Mírame por favor.
Mírame, mírame por un momento por favor. Mira cómo tengo las piernas, mira cómo tengo los brazos. Mira mi rostro…¡mira cómo lo tengo!
Si pudieras ver cómo tengo el corazón. Mírame por favor.
Me da vergüenza decir que fue mi mujer la que me ha hecho esto.
Me quité la camiseta y volteé para que Joaquín mirase bien las heridas de mi espalda. Es mi mejor amigo, y se lo he ocultado por mucho tiempo. Pero ya no puedo solo con esto. Necesito su ayuda. El silencio que ha caído en su sala es incómodo y demasiado largo. No sé qué decirle y espero pacientemente que sea él quien comience la conversación con preguntas que seguramente sabré cómo responder.
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